¡Mi gato tiene una calva! Ayúdale con estos consejos

Tener pelos de gato por toda la casa, incluso en tu ropa, es normal. Los gatos se lamen de forma natural. De hecho, dedican hasta un 25% de su vida a lamerse a sí mismos.

Si se lamen mucho puede ser un problema cuando provoca la caída del pelo o calvas en el gato: verás una línea o raya en la espalda o en la pata de tu gato que parece pelo corto o recién crecido. El lamido excesivo no solo hace que tu gato esté menos bonito, también puede abrir las puertas a posibles infecciones de piel.

Ten en cuenta que, en algunos casos, puede que no veas a tu gato lamerse, morderse o tirarse del pelo. ¡La mayoría se lamen por la noche o cuando no estás en casa!

Si se lame mucho puede ser debido tanto a causas médicas como emocionales.

Si tu gato tiene problemas de piel o si le has cambiado la comida recientemente, este lamido excesivo puede ser una reacción alérgica. Consulta tu veterinario para descartar cualquier enfermedad.

Una zona calva en tu gato o si se lame mucho también puede ser debido a malestar emocional. Muchas cosas pueden afectar la necesidad natural de tu gato de estabilidad:

• Cambios recientes en el hogar: mudanza, traer muebles nuevos, reformas, un nuevo bebé en la familia...
• Otra mascota en el hogar o en el vecindario: a los gatos no les gusta compartir recursos como el arenero, la comida, etc. Esto podría hacer que se escondan.
• Cambios recientes en tu rutina: ¿han cambiado tus horarios, estás más ocupado y pasas menos tiempo con tu gato?

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